30 julio, 2009

Me supera la capacidad de charla que tiene la sra. que trabaja en casa. No para de hablar. De cualquier cosa. Aparte, no es que espera un tiempo prudencial a que uno se despavile cuando se levanta. No no no y no. Ella ve que abrís la puerta y ya esta detrás tuyo hablándote, sobretodo de sus problemas gastrointestinales. Y hoy no fue la excepción,
Salgo de mi cuarto, dormida con los ojos semi abiertos y ya aparece ella. Me persigue hasta la cocina y mientras pongo a hervir el agua para un te me dice:
Sra: " vos sacas plata del cajero".
L: no (meeeeeeeeeeeeeeeeeeeentiraaaa..pero ya veia venir el choclo de historieta).
Sra: ah...
L: (zafé jejejeje).
Sra: ...........
Sra: Bueno igual te cuento, porque el señor que vive en la casa que yo trabajo ,, blablablablablablablablabla..........le robaron.
L: ahh mira, aja,,....claarooo....sisi pobree..
Y me fui. Te juro no me gusta pero la mayoría de las veces digo una excusa y me voy (amablemente y cuando termino UNA de sus historias), por que sino empieza a hablar de nuevo y es un em bo le!